Salvajemente estrellado

Otra sudadera que se me hizo eterna... Se trata del modelo 20. Wild and Wool de la Ottobre 4/2015. Cuando hay tantas piezas que montar hay un momento que me da una pereza tremenda... Aunque este peque es de lo más agradecido para sus costuras.

Y tanto tiempo pasó que los bolsos desaparecieron... Algún día aparecerán por alguna parte, pero por ahora así queda la cosa.

La revista ofrece dos versiones, yo hice la mía propia: además de sin bolsos tampoco le puse coderas. Ni bieses diferentes.

El biés que lleva en el canto del gorro lo saqué de la propia tela de la sudadera. Lo que saco en conclusión de las capuchas de esta revista es que son pelín grandes... (Y ahí estamos con la sonrisa forzada para la foto y las gafas de nieve, en un día bien soleyeru, por si cae algún copo, que nunca se sabe...).

Para tapar la costura de unión de la capucha con el cuerpo una cinta de Hilos y más. Tela de sudadera de Cal Joan y retal del interior del gorro de Telas Pedro (usado en mi Osha). Costura que enlazo al blog de Fans de Ottobre.

Las fotos de esta sesión doble (en otra entrada os enseñaré la segunda costura) están hechas en el entorno del Valle del Samuño y su ecomuseo minero, en el concejo de Langreo (la experiencia incluye, entre otras cosas, la visita al pozo San Luis, declarado Bien de Interés Cultural por su excelente estado de conservación, y una ruta en tren recorriendo parte del trayecto por el que se transportaba el carbón). Me encantan las ruinas, da igual si son de piedras o de patrimonio arqueológico industrial, y en esta zona de las cuencas mineras hay mucho, por desgracia. Y digo por desgracia por la cantidad de puestos de trabajo perdidos y la riqueza añorada... Para mí tiene una magia especial pasear por estos entornos, escuchar las voces y ruidos del pasado en el interior de una Casa de Máquinas, la Lampistería o aventurarse a una boca de pozo hoy inundado por donde cada día subían y bajaban miles de mineros y toneladas de carbón.